viernes, 17 de diciembre de 2010

Capítulo 7

Corazón compartido

Me levanté más temprano de lo habitual la mañana del 12 de julio, un sueño o pesadilla fue la que me despertó, llevaba 2 noches seguidas soñando con Adam. Ese lunes era el primer día de clases del semestre de verano que como el año pasado habíamos tomado para adelantar un semestre, este sería mi tercer semestre en la universidad. Antes de bajar a la cocina decidí pasar por la habitación de Adriana, desde que habíamos tenido la conversación con Vanessa estaba igual de triste que como se fue a Canadá la semana anterior “toc, toc”

-Pasa…_ dijeron desde el interior de la habitación. Abrí la puerta y ella estaba acostada

-Hola extraña…

-Hola_ me dedicó una sonrisa débil

-Como amaneces?

-Viva al menos…_ eso solía decirlo yo cuando me sentía mal por algo y por lo visto ella decidió utilizarlo para no decir “mal”

-Bendito sea el señor entonces….!_ logré robarle una sonrisa sincera_ Creo que ya es hora de levantarnos y seguir Adriana, hoy es ese día, ya creo que fue suficiente llorarlos y extrañarlos no crees? No van a volver Adriana, lo hacen por nosotras y nosotras tenemos que agradecérselos y hacer lo que ellos quisieran que hiciéramos, seguir adelante sin ellos, tratar de ser felices con lo que tenemos

-Tienes toda la razón

-Siempre la tengo. Además, no nos sienta bien este melodrama…_ ambas sonreímos abiertamente_ Así que vamos, arriba! Sonríele al día y a la vida, nos vienen días mejores y muy felices, te lo aseguro_ le dediqué una sonrisa amplia, yo misma necesitaba creerme a mi misma todo lo que le estaba diciendo a Adriana.

Adriana, Andrés y yo salimos a nuestra hora acostumbrada de la casa para ir a la universidad, Vanessa no le había dicho nada aun a Andrés, él andaba feliz por todos lados, adoraba verlo sonriendo y tan feliz. Llegamos a la universidad y no estaba tan llena como de costumbre, eran pocos los estudiantes que tomaban el semestre de verano; me bajé del carro y Simon estaba estacionado donde siempre esperándome con los brazos cruzados, sonrió apenas nos vio

-Hola Simon_ dije brindándole una corta sonrisa, me ponía feliz verlo

-Hola chicos_ Andrés y Adriana lo saludaron y se fueron a sus respectivas clases

-Que tal tu domingo?

-Bien, en casa con Rachel acomodando ciertas cosas descompuestas_ empezamos a caminar hacia nuestro edificio lentamente_ Hablaste con Vanessa?

-Sí, le pedí que dejara a Andrés por el bien de todos, fue una conversación bastante difícil, pero ella es una chica lista y nos quiere, no he hablado con ella desde entonces.

No hablamos casi en el resto de la mañana, las clases fueron algo pesadas, Vanessa llegó solo a la última clase. Sonó el timbre de salida a las 12.00 del medio día, tomé mis cosas al igual que los demás, Vanessa tenía algo de prisa

-Vanessa!_ la detuve cuando se levantó del pupitre_ Por qué tanta prisa? Apenas me saludaste…

-Oh! Disculpa Alex. Es que bueno, tengo que alcanzar a tu hermano, tu sabes, hoy es el día_ dijo bastante triste. En eso se nos unió Simon. Tomé la mano izquierda de Vanessa

-Haces lo correcto, créeme

-Lo sé_ bajó la mirada y salió a toda velocidad del salón de clases

-Debe ser muy difícil para ella_ me dijo Simon a mis espaldas

-Lo es… pero hay que ser realistas y conscientes

-Bueno olvidémonos de las cosas malas. Que tienes planeado hacer ahora?

-De cuánto tiempo me estás hablando? Dentro de los próximos minutos o días?

-Minutos

-Nada, a donde pretendes invitarme?_ dije sonriendo un poco

-A que me ayudes en algo

-Ayudarte? Ayudarte a qué?

-Ya lo veras, acompáñame a buscar las cosas en la camioneta_ fui con él hasta el estacionamiento totalmente intrigada por saber que tramaba, pero sabía que fuera lo que fuera me iba a divertir, Simon tenía ese poder. Llegamos a su camioneta y sacó un bolso y un balón de futbol_ Vamos!_ me tomó de la mano y fuimos hacia el campo de futbol

-Simon, futbol? Creo que no estoy vestida como para jugar futbol, no crees?

-Ya pensé en eso. Traje algo que se que te va a gustar_ abrió el bolso y sacó un uniforme y unos tacos, el uniforme era de la Real Federación Española de futbol_ póntelo_ sonrió abiertamente. Estúpida sonrisa que adoraba, era tan cautivadora, era imposible decirle que no

-Ok, ok, ok tu ganas_ tomé el uniforme y fui a los vestidores a cambiarme. Me lo puse, increíblemente me quedaba a la perfección, me sentí extraña vestida de esa forma. Me agarré una cola de caballo y me miré de nuevo en el espejo <> salí de los vestidores y Simon me estaba esperando en la puerta, tenía puesto el uniforme de la selección italiana

-Wow!_ me miró de arriba abajo impresionado_ nunca pensé que te quedaría tan bien el uniforme, tengo buen ojo por lo visto_ logró sonrojarme_ Vamos…._ caminamos hasta el campo de futbol de la universidad, afortunadamente estaba solo, me sentía como una tonta vestida así, pero como siempre decía, todo era cuestión de actitud, así que tuve que meterme en el papel de una deportista para no sentirme tan avergonzada. Dejamos nuestras cosas en las gradas y fuimos al centro del campo

-Un partido de dos jugadores?

-Sí, solo tú y yo, a ver qué tan buena eres_ dijo con una sonrisa maquiavélica dibujada en el rostro lo cual me hizo mucha gracia

-Ok, ok presume tus talentos deportivos que después de todo los adquiriste de mi

-Hey!_ reímos a carcajadas por unos momentos. Simon puso el balón en el centro del campo_ Quién hace el saque inicial?

-Yo…_ patee suavemente el balón con el pie izquierdo con astucia

-Hey! Eso es trampa_ dijo mientras corría detrás de mi

-Sin reglas, al menos no me las diste…_ corrí mientras dominaba el balón hacia el lado izquierdo del campo donde era mi portería y anoté el primer gol_ Goooool!!!_ sonreí abiertamente mientras jadeaba

-Que tramposa eres…

-Por Dios Simon, creo que tienes mucho más que dar, esfuérzate un poco más, te vas a dejar ganar por una mujer?_ tomó el balón y fuimos de nuevo al centro del campo, pero esta vez sacó él con la misma astucia con que yo había sacado, corrí detrás de él para quitarle el balón y lo logré pero él me lo arrebató cuando iba a mitad de campo hasta que logró anotar su primer gol. Pasamos alrededor de una hora jugando hasta que íbamos 15-10 a mi favor_ Simon ya! Estás pasando vergüenza, te llevo 5 goles de ventaja_ dije mientras me detuve jadeando en pleno campo, sudaba mucho hacia demasiado calor. Simon vino corriendo hacia mí y me cargó poniendo mi vientre en su hombro derecho quedando con la cabeza colgando, forcejee para que me bajara_ Bájame…!

-Niña tramposa…_ moví con mucha fuerza las piernas, pero la risa no me dejaba imprimirle mucha fuerza hasta que resbaló y caí de espalda en el suelo y el cayó sobre mi mientras nos reíamos_ Eres buena, eh?

-Me dejaste ganar, no creas que no me di cuenta…

-Con semejantes trampas como no ibas a ganar?_ nos reímos por unos segundos hasta que nos quedamos como en una especie de “mute” mirándonos a los ojos, el estaba encima de mí en el suelo, me sentía extraña, como si estuviera flotando, el corazón empezó a acelerarse de nuevo, pero esta vez no era por actividad física, sino por tener tan cerca a Simon_ Ehm, creo que ya debemos irnos, ya me ayudaste a entrenar lo suficiente_ se levantó y me dio su mano para ayudarme a levantar, caminamos hacia las gradas algo silenciosos_ Vamos a mi casa, Rachel hizo macarrones con queso para hoy

-Me encantaría…_ fuimos hacia el estacionamiento cuando nos interceptaron un par de chicas que estudiaban con nosotros una se llamaba Shannon y la otra Taylor

-Hola Simon!_ dijo Shannon, era muy coqueta, vestida con ropa de marca, muy estilizada o mejor dicho plástica, pero nunca la había detallado lo suficiente o la había tomado en cuenta, era un ser común y silvestre y con poca importancia dentro de mi vida a decir verdad

-Hola Shannon…_ dijo Simon con educación y una media sonrisa

-Necesito otro favor tuyo. Será que esta tarde puedes pasar por mi casa revisando mi computadora, está algo lenta y tengo problemas con la conexión a internet_ levanté ambas cejas en señal de sorpresa y miré de medio lado a Simon

-Eh, bueno, no puede ser otro día Shannon? Es que esta tarde no puedo, tengo cosas que hacer con Alex…_ me señaló, con su dedo pulgar izquierdo, yo estaba a su lado pero al parecer ella no me había notado, sonreí hipócritamente cuando ella me vio

-Oh! Hola Alex, disculpa que no te saludé, en realidad no te noté. Y no puedes cancelar Simon? Es que necesito la computadora

-Simon de verdad si quieres comemos otro día en tu casa…

-Ves? Ella no tiene ningún problema

-No, de verdad discúlpame Shannon, si quieres mañana paso, pero no tiendo a cancelar compromisos previamente adquiridos_ miré a Simon y creo que alcancé a sonreír, miré a Shannon y tenía cierta expresión de cólera, me recordó mucho a Phoebe

-Oh…! Bueno será. Te espero mañana en mi casa a eso de las 4.00. por cierto Alex, que es de la vida de Adam?_ “Bang!” disparo directo al corazón, como se diría en boxeo “golpe bajo” pero sabía que las intenciones de ella iban mucho más allá que solo saber de Adam, era para saber si seguía siendo su novia para dejarle el camino libre con Simon

-Supongo que está bien, se mudó fuera de Estados Unidos, no hemos hablado desde entonces…_ volví a sonreírle hipócritamente

-Bien Shannon, nos vemos mañana en tu casa_ Simon me tomó del brazo, las esquivamos a ambas chicas y caminamos hacia nuestros autos_ Nos vemos en mi casa entonces, voy detrás de ti_ me quedé observándolo unos segundos con los ojos un poco cerrados, el ceño fruncido y con ganas de que se me escapara una sonrisa_ Qué?

-Desde cuando eres técnico de computadoras?

-Un don, soy bueno reparando cosas. Celos….?_ dejó libre una sonrisa. Negué con la cabeza dejando salir una sonrisa y subiendo ambas cejas. Me monté en mi carro y conduje hacia su casa que quedaba hacia el oeste de la ciudad no muy lejos de la universidad. Llegamos a casa de Simon, su “tía” Rachel simpática como siempre almorzó con nosotros, conversamos cosas totalmente triviales y normales hasta que tocó el tema de cómo nos fue en el viaje a Tampa, siempre contábamos lo mismo y encontrábamos una tangente para salirnos del tema del viaje. Terminamos de almorzar y ayudé a Rachel a recoger los platos pero no me dejó lavarlos

-Bueno creo que ya me tengo que ir, tengo que darme un buen baño_ dije haciendo una mueca de asco hacia mí misma, tenía puesto aun el uniforme de futbol, Simon sonrió

-Yo te acompaño hasta la puerta_ me dijo Simon

-Gracias Señora Rachel, estuvieron muy buenos los macarrones

-No hay de que mi niña, gracias a ti por la visita. Y por favor para la próxima llámame tía Rachel como hace el grandulón este, ya eres parte de la familia, o al menos lo considero así y sé que no soy la única, además que me caería bien tener otra sobrina_ sonreí ante semejante proposición

-Está bien “tía Rachel”_ me abrazó dándome un beso en la mejilla. Simon y yo caminamos hacia la puerta principal_ Tu tía es lo máximo…

-Te tiene bastante aprecio Alex, es de esperarse_ hicimos una breve pausa mientras Simon me abría la puerta

-Oye Simon, gracias. Otra vez gracias, no sé cuantas veces te diré gracias, tendré que imprimir un cartel que diga “Gracias Simon”_ ambos reímos

-Por qué las gracias? Por la comida? No tienes nada que agradecer, eres tú la que siempre me alimentas, o no?

-Si es cierto, opto mejor por vestirte que alimentarte, sale menos costoso_ ambos volvimos a reír_ y no es solo por la comida, es por lo de hoy. Gracias por hacerme sonreír de nuevo, por pensar en mi bienestar. Esto del partido te quedó genial, de verdad. Y gracias por preferir quedarte conmigo antes de irte a reparar computadoras…_ sonreímos, sabía que no debí tocar ese tema porque era dejar ver lo celosa que estaba, pero no lo pude evitar

-Siempre voy a preferir estar contigo Alex, lo sabes…._ al decirme tal cosa sentí como las piernas se me desvanecían, algo me invitaba a besarlo, pero sabía que no debía. Me lancé sobre el parándome en puntillas y lo abracé fuerte por unos segundos y le di un beso en la mejilla derecha

-Nos vemos mañana en la universidad…._ me fui de regreso a casa conduciendo despacio. Empecé a recordar lo que me había contado Vanessa el fin de semana de los sentimientos vampíricos y por alguna razón tuve muchísimas ganas de volver a Adam, pero esa no era una novedad, pasé largas semanas anhelando verlo así fuera por unos segundos una última vez, pero las posibilidades de que eso ocurriera eran muy remotas, no tenía ni la más mínima idea de donde podría estar Adam y Sam, pero me sentía confundida, todo era tan nublado cuando recordaba a Adam; yo no sabía en qué etapa estaba, pero sabía que ya estaba mejor desde la partida de Adam y eso se lo debía a Simon, no sabía con exactitud que me pasaba con Simon, era tan diferente a lo que sentía por Adam. Por Adam sentía atracción, deseo, pasión, amor desmedido, deseaba estar con él a todo momento y por Simon sentía cariño, ternura, sentía la necesidad de estar con él siempre, cada vez que lo miraba a los ojos me sentía segura a su lado y posiblemente estaría a punto de sentir amor, pero como iba a saberlo?

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