lunes, 11 de octubre de 2010

Capítulo 11

Perdóname

Me voltee y mis hermanos estaban en la entrada de la sala observándome, yo tenía una sonrisa abierta, no podía ocultar mi felicidad. Adriana vino hacia mí y me abrazó

-Ahora somos concuñadas y hermanas a la vez, más unidas imposible. Lo ves? Todo pasa por una razón así nosotros no nos demos cuenta

-Si lo sé, la vida es tan extraña…_ esta vez Andrés vino hacia mí y me abrazó

-Vaya sorpresa nos diste Alex, pero por lo que veo fue más sorpresa para mí, yo pensé que vendrías a darme la noticia de que eras novia de Simon más bien_ era algo de esperarse y lo más lógico

-Si, no?, pero Simon es sólo un gran amigo a quien adoro, nada más

-Si pero creo que eso él no lo va a entender tan bien como nosotros_ en eso Andrés tenía mucha razón, siempre la tenía_ tus gustos son tan raros Alex, o sea no digo que Adam sea mal parecido (ay por Dios! Ya empiezo a hablar como una mujer, eso es lo malo de tener sólo hermanas hembras), pero a lo que me refiero es que pensé que elegirías a Simon, se nota a leguas que te quiere. No digo que Adam no, pero es tan raro, como… no sé, en eso se parece mucho a su hermano_ todos nos fijábamos en lo enigmático de los hermanos Vangarret

-Hablando de otras cosas hermanito, hoy como Cupido anda lanzando flechas como loco, a ti no te interesa ninguna chica?_ la expresión le cambió un poco

-No, ninguna en serio al menos. Hay chicas muy lindas por aquí pero no me he detenido a ver a ninguna realmente, saben que todavía amo a Liliana, llevamos casi 4 meses separados y a pesar de pedirle que no me buscara ni que me escribiera ni llamara; me duele no saber de ella. Supongo que me falta tiempo para poderla olvidar del todo_ Adriana y yo lo abrazamos al mismo tiempo

-Tranquilo Andresito, pronto lo harás… es cuestión de tiempo, pero deberías ver un poco más allá, estoy segura que hay más de una chica interesada por ti_ mi hermano era guapísimo. Alto, piel trigueña, ojos ámbar, cabello ondulado color castaño oscuro, musculoso, inteligente, dulce, alegre…. En fin… que más se podía pedir de un hombre?

-Ah sí…? Como quién?_ Adriana y yo nos vimos. No sabía si Vanessa me fuera a matar, pero yo sabía que eso daría resultado

-Vanessa por ejemplo…._ le sonreí, él se extrañó

-Si? Vanessa? Wow! Nunca me había dado cuenta. Ella es tan dulce y rara, entusiasta, es muy linda la verdad_ era como si ahora se detuviera a ver sus cualidades. Saber que alguien gustaba de ti siempre hacía que te detuvieras a detallarlo

-Lo ves….? A lo mejor ella es quien te puede ayudar a olvidar a Liliana

-Puede ser… pero es muy pronto para hablar de eso, ya veremos que nos dice el tiempo chiquitas_ nos alborotó el cabello con la parte de delante de la cabeza sonriéndonos y abrazándonos a las dos al mismo tiempo. Mi familia era lo más hermoso que poseía, bueno y ahora Adam. Pero mis hermanos eran los mejores del mundo al igual que mis padres, siempre contábamos los unos con los otros y siempre estábamos unidos.

Subí a mi habitación y tomé una ducha, Adam siempre estuvo en mi mente durante todo ese momento. Todo lo que hice, lo hice con una sonrisa en la cara, estaba demasiado feliz. Salí del baño y vi hacia la ventana y un cuervo estaba parado en la orilla, como hacía para abrir la ventana? Pero ya la presencia del cuervo me estaba empezando a fastidiar. Me acerqué, lo espanté y cerré la ventana con seguro. Hacía bastante frio, me tuve que poner medias y un sweater, ya el otoño había empezado. Me acosté y en lo único que podía pensar era en Adam, no sabía si conciliaría el sueño debido a la emoción, pero si lo hice.

Me desperté a las 6.30 de la mañana, me levanté como todos los días. Me puse unos jeans desteñidos, unos zapatos deportivos, una franelilla verde oliva y un sweater blanco, ese día me recogí el cabello como una cola de caballo.

Me fui a la universidad con Adriana, llegamos a la universidad de muy buen humor, ambas teníamos unas sonrisas radiantes, ella estaba preciosa, tenía mucho tiempo que no la veía tan feliz, ella no era de la clase de chica que saliera seguido con chicos y menos tener una colección de novios. Me estacioné donde siempre y para mi sorpresa Adam y Sam nos esperaban recostados del jeep negro que estaba el puesto del frente

-Buenos días señoritas Torres_ vinieron hacia nosotras sonriendo, parecían un par de Adonis

-Buenos días señores Vangarret_ Sam fue hacia mi hermana y Adam hacia mi

-Como pasaste la noche? Por lo visto muy bien…_ Adam me dio un beso y me miró con dulzura, el sol hacía que brillaran sus ojos y resaltara su tono gris oscuro

-Excelente…!_ nos fuimos caminando tomados de la mano hacia el salón de clases. Pero antes de entrar le solté la mano sin que se diera cuenta. Lo más seguro Simon estuviera adentro y no creo que le cayera muy bien ver esa escena. Ambos entramos conversando casualmente y en efecto Simon estaba dentro del salón al igual que Vanessa, nos vieron, Simon hizo un gesto de molestia y Vanessa un gesto parecido pero era más de preocupación, pero Adam no se dio cuenta por fortuna. Tomamos nuestros puestos y saludé a Simon con la mano en el aire y una sonrisa nerviosa. Entonces saludé a Vanessa que estaba en el puesto de mi lado derecho

-Qué haces con Adam? Ustedes no estaban peleados o algo así?

-Si, pero resolvimos eso anoche, ahora somos novios…_ le guiñé el ojo

-Alex! Te advertí que no estuvieras con él…._ Adam volteó a mirarla con una mirada fulminante. Que horrible se sentía, ninguno de mis dos mejores amigos quería a Adam

-Si lo sé… pero que cuento hay de Adam? Qué es eso que me “separa” de él?, que hasta él mismo lo dice…_ lo dije en voz muy baja para que él no escuchara. Los ojos de Vanessa se pusieron como negros, la pupila ocupaba gran parte del iris, era como un gato cuando se le dilataban las pupilas cuando estaban cazando

-Será porque él sabe que no debe estar contigo, ese tipo no me gusta para nada Alex y lo sabes_ su expresión dulce habitual se había transformado a una agresiva

-Ay por Dios Vanessa! Ya empiezas a hablar como Simon….

-Será porque tenemos razón?_ eso me dejó pensando, pero nuestra conversación la interrumpió la profesora Williams.

Sonó el último timbre de la mañana y salimos de clase y yo salí corriendo al baño, me estaba orinando. Cuando salí del baño vi a cierta distancia a Phoebe, estaba hablando con Adam. Me dieron ciertos celos, pero no los suficientes como para armar un dramón, no me quise acercar a ellos, se veía que estaban discutiendo. Me fui caminando por el patio lateral que daba hacia mi edificio hacia el estacionamiento y en eso me alcanzó Simon

-Alex! Vas al estacionamiento?

-Si….

-Bueno acompáñame, tengo algo para ti…_ <> que era?_ me agarró por la mano izquierda y corrimos hacia el estacionamiento hasta que llegamos a su camioneta_ Sé que te va a encantar!_ abrió la puerta trasera de la camioneta y sacó una cesta de paja mediana del puesto de atrás, cuando la bajó era un gato blanco con un lazo rojo en el cuello_ Toma… es un regalo que quise hacerte, se que te gustan muchos los animales y supuse que querrías una mascota_ extendió la cesta hacia mi

-Para mi….!? Un gato…? Gracias Simon…!_ lo abracé con el brazo que me quedaba libre_ es el mejor regalo que me has podido hacer…_ tenía una amplia sonrisa, se veía hermoso sonriendo

-Vas camino a la escuela?

-Voy a comprar un libro antes, por qué?

-Necesito hablar algo contigo antes, podríamos?

-Si, claro…._ que tenía que hablar Simon conmigo?

-Vamos al parque, dame tus llaves, yo manejo_ le di las llaves de mi carro y me monté en el copiloto con la cesta con el gato dentro, encima de mis piernas. Lo iba acariciando_ Que nombre le vas a poner?

-Qué es…?_ levanté al gato para ver si era macho o hembra y era macho_ Se va a llamar Simba

_Simba? Como El Rey León?_ El Rey León era una de mis películas de Disney favoritas

-Si, desde niña amé esa película

Llegamos al parque y dejé a Simba en la cesta en el puesto trasero. Entramos al parque y nos sentamos en nuestra banca en frente de la laguna del parque

-A ver…. Qué es eso tan importante que quieres decirme?_ se puso algo nervioso, lo notaba en su mirada azul como el cielo, lo conocía demasiado. Miró hacia el cielo por un momento, me agarró ambas manos, entonces deduje que podía ser. <>

-Alex….Llevamos casi 4 meses conociéndonos y hemos compartido cosas geniales. Eres la mujer más maravillosa del mundo! No sé si te has dado cuenta, pero yo te tengo situada en un lugar muy especial en mi vida….

-Si yo también Simon…_ lo interrumpí con la idea de cortarle la idea pero él me interrumpió a mí

-En serio!? O sea me refiero a que eres “demasiado” importante para mí, te convertiste en alguien especial desde el día en que te conocí. Y no sé si te has dado cuenta, me imagino que sí. Pero ya no puedo callar más esto_ <>_ Alex, quieres ser mi novia?_ <> lo sabía!

-Que….qué!?_ le quité mis manos_ Simon…._ que le iba a decir!?_ Simon…. Tu eres un ser mega especial para mí, te adoro…._ su expresión cambió de repente

-Pero……?

-Pero no lo suficiente para ser tu novia, eres uno de mis mejores amigos Simon, y te adoro por eso. Además…… tengo novio_ tenía que decírselo

-Que tienes novio!? Pero quien? Por lo menos me hubieses contado, no se supone que eso es algo que sabe un “mejor amigo” así yo no hacía este numerito tan patético_ como demonios le iba a decir que era Adam?

-Simon…. No hables así por favor, y no te lo había dicho porque pasó anoche cuando llegué a mi casa. Es Adam…._ su expresión triste pasó a ser de furia

-Adam Vangarret….!? Pero por qué!? Por qué él!?

-Simon cálmate por favor_ le tome las manos_ no te pongas así….

-Que no me ponga así!?, apenas te he visto hablar con ese tipo, y una de las pocas veces que te vi hablando con él te hizo llorar, eso no significa nada bueno

-Es un poco complicado de explicar…

-Si ya me doy cuenta….

-Simon, por favor, no te molestes conmigo, perdóname por favor…._ se calmó y su expresión volvió a ser triste

-Por qué Alex? Por qué lo elegiste a él? Por qué no yo?_ me sentía fatal, quería llorar_ Y yo pensando como un idiota que podía gustarte, incluso ver anoche que tu hermana y Sam hicieron el anuncio de su noviazgo eso me dio valor para pedirte que fueras mi novia, y mira todo lo que salió de todo esto…._ miraba al cielo_ Todo por nada_ dijo en voz baja pero no lo suficiente para no escucharlo

-Simon, perdóname pero sabes que esto de los sentimientos es algo muy complicado y por desgracia no mandamos en ellos

-Si, yo me se ese discurso, tranquila_ me quitó sus manos y se levantó del asiento

-Simon espera por favor! Perdóname!

-Tranquila…. Ya se me pasara, pero ahora quiero estar sólo…_ me acarició la mejilla izquierda y se fue. Yo me senté soltando algunas lágrimas, cuánto daño le había hecho? Me quedé unos minutos sentada viendo el agua, solo recordaba la mirada triste de Simon, yo no soportaba ver un hombre triste y mucho menos llorando.

Se hizo la 1.30 del medio día y me fui al carro, cuando iba caminando llamé a Adriana para que pasara buscando a Simba por la escuela, no podía tenerlo mientras estaba con los niños y menos lo podía dejar tanto rato sin comida ni agua en el carro encerrado. Recibí al otro grupo de niños de 3er grado ese martes a las 2.00 de la tarde, las dos horas transcurrieron casi igual que las de día anterior eran niños un poco más grandes pero el truco de los dulces funcionó de igual manera. Hablé con ellos sobre el juego de béisbol contra los niños de segundo y estuvieron de acuerdo, se mostraron entusiastas.

A pesar de mostrarles el mejor de mis humores, en realidad me sentía mal, estaba deprimida, acaso ese era mi estado de ánimo cotidiano nuevo?. Terminaron las 2 horas y me despedía de los niños, caminé lento casi arrastrando los pies hacia el estacionamiento con la cara larga. Cuando vi hacia mi carro Adam me estaba esperando recostado de él.

-Que cara traes…. Debes estar cansada_ cansada? No tanto la verdad, <<…será que le cuento a Adam?>>

-Si, algo…_ le di un beso y abrí la puerta del carro. Adam era el único que podía alegrarme en ese momento. Nos montamos en el carro y manejé camino a mi casa_ cómo supiste a qué hora salía?

-Le pregunté a Adriana…._ me puso la mano en el muslo derecho_ que te pasa Alex?

-Después te cuento, si?

-Quieres ir a dar una vuelta?

-Quiero ir al bosque, necesito respirar aire fresco_ me miró extrañado, sin duda sabía que algo me pasaba.

Llegamos a mi casa y abrí la puerta anunciando mi llegada como nosotros solíamos hacer siempre desde que llegamos a Estados Unidos, ya se nos había vuelto costumbre obligada. Adriana bajó trotando por las escaleras con Simba en los brazos

-Simba es una ternura de gato Alex…. Hola feo…._ se dirigió a Adam con una sonrisa burlona y él se la respondió. Al ver a Simba me dio más nostalgia, me recordaba a Simon, era uno de los mejores regalos que había recibido en mi vida, Simon me conocía muy bien. Adriana me tendió los brazos para que yo cargara a Simba, era un gato grande

-Desde cuando tienen gato?_ Simba se inquietó un poco, lo acaricié para tranquilizarlo y se calmó. Adam extendió la mano para acariciarlo y apenas lo tocó Simba maulló fuerte y brincó al suelo_ Creo que no le caigo bien…_ que raro…bueno a decir verdad Adam no era de la clase de chicos que le cae bien a todo el mundo, era muy mal encarado y serio, pero eso era lo que lo hacía irresistible.

-Descuida, ya te agarrará cariño….

-No soy como tú que todos te aprender a querer tarde o temprano_ me sonrió buscando sacarme una a mí y lo logró.

Dejé mis cosas en mi habitación y bajé rápido sólo con el bolso pequeño donde llevaba una manta de rallas, la cámara y la linterna. Adriana y Adam estaban en la cocina charlando. Tomé un termo con agua de la nevera y llené otro con jugo de limón que había hecho Adriana; agarré unas galletas Oreo de la lacena y abrí la puerta trasera

-Adri, volvemos en la noche, vamos al bosque a la laguna, cualquier cosa llevo mi celular. Vamos Adam….

No hay comentarios:

Publicar un comentario