martes, 5 de octubre de 2010

Capítulo 7

Y aparecieron los primeros enredos

Simon y yo salimos de la casa y me abrió la puerta del copiloto de su camioneta con una galantería que nunca había visto en persona

-Qué quieres hacer primero?

-No sé, tú eres mi secuestrador hoy, vayamos a donde quieras

-Bueno, vayamos a dar una vuelta por ahí antes de ir al cine, se que te va a gustar_ me puso la mano sobre la mía que reposaba encima de mi bolso que tenia encima de las piernas, eso me provocó un vacío horrible en el estómago y me aceleró el corazón, tenía tiempo que no me sentía nerviosa por la presencia o una acción de un hombre.

Me llevó al parque donde Sam había llevado a mi hermana, era muy bonito, había gente trotando por los alrededores y niños regados por ciertas partes. No sé si era debido a que estaba con Simon y me sentía feliz estando con él, pero era una tarde bella, faltaba la musiquita romántica de fondo

-Quieres algodón de azúcar?_ años que yo no comía algodón de azúcar, creo que desde que era niña

-Si, claro, tengo mucho tiempo sin comer uno_ nos paramos en el puesto donde un señor vendía los algodones, apenas un grupo de tres niños terminó de pedir los suyos, salieron corriendo a seguir jugando. Me comí el primer bocado_ tenía tiempo sin sentir el algodón deshaciéndose en mi boca, es una sensación extraña

-Si, siempre me han gustado los algodones de azúcar, es como volver a ser niño_ que extraño era oír hablar a un hombre de esa forma, pero eso lo hacía aun más especial.

Caminamos alrededor del parque hablando tonterías y nos sentamos en una banca que había cerca de una laguna artificial que habían hecho en el parque

-De que parte de Venezuela eres?

-De Caracas_ que bueno y que nostálgico me resultaba recordar mi hogar

-Caracas… nunca he ido, me han dicho que es bonita y tiene trenes muy ordenados, pero mis amigos que han viajado me hablan mucho de sus playas y sus selvas

-Bueno si, gozamos de las mejores playas del Caribe, y la Gran Sabana llama muchos turistas extranjeros. Tu desde cuando vives aquí?

-Vivo aquí desde hace poco, hace pocos meses, ya me perdí en el tiempo

-Y tus padres?

-Buenoes una larga historia

-Qué paso con ellosl? Murieron?

-Si

-Oh por Dios! Lo siento, no sabía….

-No tenías que saberlo, apenas lo recuerdo. Pero bueno no sigamos hablando de eso. Y tus padres como se llaman?

-Mi madre se llama Ángela Gutiérrez y mi padre se llama Carlos Torres. Soy de descendencia española, mis abuelos paternos lo eran, se mudaron a mi país en los años 40

-Genial!_ Su mirada había cambiado, quería demostrarme alegría, pero desde que tocó el tema de la muerte de sus padres, su humor había cambiado, bajó la mirada nuevamente

-Simon_ le tomé la barbilla con los dedos índice y medio de mi mano derecha y le subí la cara, tenía los ojos aguados_ todo está bien, tus padres están bien y deben estar orgullosos por ver en lo que te has convertido, aunque no sé exactamente en que sea eso que te hayas convertido, pero sé que están orgullosos…_ le sonreí para alegrarlo y él me respondió la sonrisa y me dio un abrazo de esos que deseas no separarte de esa persona, pero fue muy breve

-Gracias Alex… bueno, en que me he convertido? Soy estudiante del primer semestre de Geografía de la Universidad Independence. Soy deportista, surfeo seguido y practico soccer. Como debes saber, los italianos amamos el futbol_ claro, eso debía explicar su complexión física y su bronceado

-Deportista? Ohhhhhh_ dije de forma exagerada para bromear_ yo de casualidad iba al gimnasio, pero también solía practicar algo de futbol, pero eso fue sólo hasta los 17 años, ya se me debe haber olvidado

-No lo creo, deberíamos jugar un día, sería divertido verte patear el balón_ ambos reímos

-Si ya lo creo, por cierto que edad tienes?

-21 y tú?

-21

-Que te parece si vamos al cine?

-Está bien…._ nos levantamos y caminamos hacia la salida del parque, fuimos al centro comercial donde estaba el cine

-Y que película quieres ver?_ consultamos la cartelera y no había alguna película nueva que no hubiera visto o que al menos no me llamara la atención.

Entramos en la sala de cine y hacía frío y a mí se me olvidó el sweater y Simon notó mi incomodidad y me puso su chaqueta. Durante la película lloré y me reí como solía hacerlo siempre, era una película de comedia romántica, el amor de los protagonistas era demasiado contrariado y tormentoso, siempre me pregunte por qué existían amores así; eran cosas que sólo se podían escribir en un libro o reflejarse en una película. No creía en el amor tan grande y eterno, pero aun así me daba sentimiento la historia, era perfecta.

La película se terminó y salimos hacia el estacionamiento

-Te llegó la película no?

-Si, es un amor demasiado torturado y tierno a su vez, es perfecta_ Simon manejó hasta mi casa, no hablamos casi en el camino, eso era raro, tampoco es que el camino fuera tan largo, sólo eran 10 minutos, se estacionó justo en frente de mi casa, apagó el carro y se bajó a abrirme la puerta

-Espero que te hayas divertido

-Más de lo que debería, gracias Simon, pero por qué no entras a cenar con nosotros?, aun es temprano

-Segura?

-100%_ le sonreí y subí las escaleritas del porche para abrir la puerta de la casa_ Llegué!_ grité anunciando mi llegada a la casa. Al cabo de 2 minutos Adriana y Andrés bajaron las escaleras

-Hola Simon!, ya veo que cumpliste tu palabra_ dándome un beso en la mejilla igual que Adriana

-Adri, el es Simon, un amigo y compañero de clases, Simon, ella es mi “linda” hermana

-Hola mucho gusto, ahora puedo corroborar de cerca lo bonita que “dije” que era_ ambos nos reímos

-Bueno Simon, con cual de mis hermanas vas a salir? Con Adriana o con Alex?_ esta vez todos estallamos en risas

-Hicieron cena?, invité a Simon a cenar

-Ehh no, pero pongámonos a preparar algo, caminamos a la cocina, adorábamos cocinar todos juntos, eso nos recordaba a la familia_ que apeteces comer Simon?

-Es italiano Adri, así que preparemos algo italiano….

-Yo quiero ayudarles, hagamos Pasta a la carbonara, es mi especialidad

-Simon por Dios!, eres mi invitado, como voy a dejar que cocines?

-Me encanta cocinar, y más cuando se trata de comida italiana_ los cuatro nos pusimos a cocinar mientras charlábamos de lo que habían hecho Adriana y Andrés durante el día, cuando recordé que debía llamar a Vanessa o si no me mataría, y así aprovechaba para invitarla a cenar también y compartiera aun más con Andrés

-Oh! Tengo que llamar a Vane, la voy a invitar a cenar con nosotros, ojalá no haya comido algo. Por cierto, como acabaron de pasar la tarde Andrés?

-Bien!, ella fue a su casa a buscar sus libros y nos pusimos a estudiar juntos, es una muchacha muy agradable_ eso era un buen avance, así que tomé el teléfono de la cocina y la llamé a su casa y la invité a casa y en menos de 5 minutos tocó el timbre y salí corriendo a abrirle

-Hola Vane!

-Hola Alex! Cuéntamelo todo….

-Simon está en la cocina haciendo Pasta a la carbonara con mis hermanos, así que vas a cenar con nosotros

-Ay no! Ya comí, hubiese sabido y no como nada

-Que lástima, bueno, pasa, no importa, acompáñanos un rato, porque de igual forma me tienes que contar que pasó con Andrés_ cenamos en el comedor por primera vez. Por fin me había librado de la imagen de Adam, y todo gracias a Simon, pero eso no duró mucho, pero no me agobió mucho su recuerdo. La cena estuvo divertida, contábamos cualquier cantidad de anécdotas; Simon nos contaba anécdotas de surf y de sus viajes por otros países. Se hicieron las 10.00 de la noche y Simon vio el reloj de la cocina mientras limpiábamos todo

-Ya es tarde, debo irme, todo estuvo delicioso, gracias por el rato

-Gracias a ti por ayudarnos a hacer la pasta, nos quedó divina, un verdadero placer conocerte Simon

-De verdad gracias hermano, puedes venir cada vez que quieras_ Andrés y Simon estrecharon las manos despidiéndose

-Chao Vanessa, un placer

-Chao Simon igual para mí, nos vemos mañana en clases

Acompañé a Simon a la puerta, se paró en las escaleras del porche y yo un escalón arriba de él me tomó ambas manos

-Gracias por todo

-No, al contrario, gracias a ti, la pase de mil maravillas

-Igual yo, nos vemos mañana_ acarició mi mejilla con su mano derecha

-Si, nos vemos mañana, cuídate, avísame cuando llegues a tu casa por favor_ le di el numero de mi celular nuevo

-Ok, que pases buena noche_ me dio un beso dulce en la mejilla izquierda, sentí que todos los bellos del cuerpo se ponían de punta. Qué lindo era Simon, el posible hombre perfecto para cualquier mujer. Lo despedí a lejos con la mano en el aire, prendió la camioneta y se perdió de vista en el camino. Entré al a casa y Vanessa me estaba esperando en la punta de las escaleras

-Que romántico!

-Si eres boba…. Es muy dulce sí, pero solo hasta ahí

-Bueno ya me contaras mañana, tengo algo de sueño y mañana hay que levantarse temprano

-Es verdad, hasta mañana entonces_ Vanessa abrió la puerta y se fue, yo subí a mi cuarto, me desvestí y me eché una ducha caliente.

Mientras me caía el agua tibia en la cara, cerré los ojos y me vino la imagen de Adam, por qué demonios pensaba en Adam cuando había pasado un día espectacular con Simon?. Me acosté en mi cama directamente, estaba muerta del cansancio y no demoré mucho en quedarme profundamente dormida. Esa noche logré dormir tranquila sin pesadillas. Me despertó el despertador. Me levante y me preparé para irme a la universidad.

Llegué a la universidad y Simon me volvió a conseguir en el estacionamiento, llegamos juntos a clases, conservaba la esperanza que Adam me volviera a hablar ese día, pero su expresión del día anterior no cambió. Lo único que me preguntaba era, que se suponía que le había hecho? Pero tampoco quería averiguarlo. Pasaron los días y Adam continuó así, mientras que Simon y yo éramos grandes amigos, solíamos pasar ratos juntos, él, Vanessa y yo, a veces se nos unía Adriana; aunque tenía días que Adriana no me hablaba ni veía a Sam.

Faltaba una semana para el cumpleaños de Adriana. Había planeado con Andrés una pequeña reunión en casa con Vanessa, Simon, Sam y dos amigas de ella, que conocía de la universidad. Solo me quedaba hablar con Sam, era el único que no sabía, tenía como una semana que no veía a Sam, así que no me quedaba remedio que preguntarle a Adam.

Era viernes en el medio día, sonó el timbre final y salí de clases sola, tratando de ocultarme de Simon, ya que tenía que buscar a Adam quién había salido un poco antes que yo. Troté por el pasillo buscándolo, hasta que lo vi parado en una hilera de casilleros con la novia, me armé de valor, respiré hondo y me les acerqué <>

-Adam…._ ambos voltearon, Adam parecía impresionado pero la tal Phoebe me fulminaba con la mirada, tenía los ojos azules como los de Simón, pero sus pupilas estaban exageradamente dilatadas al verme, ya veo por qué Sam decía que era obstinada. En ese momento le di gracias a Dios por no haber puesto en los humanos el poder de matar con la mirada, porque si no en ese momento hubiera desaparecido de la faz de la tierra

-Alexandra…._ esbozó una media sonrisa

-Disculpa, pero podemos hablar un momento?_ por qué le dije eso!?, sólo le tenía que preguntar por Sam e irme, pero en el fondo sabía que tenía que hablar con él

-Creo que lo que tengas que hablar con Adam lo puedo escuchar_ la miré por primera vez con ganas de bofetearla, no soportaba ver a una mujer o un ser entrometido

-Y yo creo que no nos han presentado, disculpa pero tú eres….?

-Su novia…

-Su novia? Bien, entonces eso responde y resuelve la situación. Eres su novia, no ninguno de sus sentidos ni su conciencia_ yo era lo bastante ácida cuando me lo proponía y no iba a permitir que ella me intimidara con su mirada asesina ni su postura de modelo enfadada. A simple vista se veía que con un soplo la sacaba volando de allí_ así que por favor si nos puedes dejar solos que necesito hablar algo importante con Adam_ ella trató de pronunciar palabra abalanzándose sobre mí, pero con la mirada encendida, incluso creo haber visto que unas venitas brotaron alrededor de sus ojos, pero debió ser producto de la rabia

-Ehhhh Phoebe, amor, mejor déjanos hablar, recuerda que no debes alterarte tanto_ ella ocultó su rostro detrás de Adam inmediatamente y se fue sin voltear _Bien Alexandra que quieres hablar conmigo?

-Solo preguntarte por Sam, necesito hablar con él sobre el cumpleaños de mi hermana Adriana, tengo días sin verlo

-Hiciste todo este rollo para preguntarme por Sam? Él debe estar saliendo de clases, toma su número de celular

-Bien, gracias, disculpa el rollo con tu novia, pero no es precisamente simpática y si ella me agrede yo le devuelvo el golpe_ me voltee con intención de irme

-Wow! Que mujer…_ dijo bromeando y dejando ver su sonrisa matadora_ Alex…. Espera, necesitamos hablar_ me voltee hacia él mirándolo incrédula

-De qué se supone que tenemos que hablar?

-No te has preguntado por qué he estado raro durante estas semanas?

-Que si no? Cambiaste de repente y nunca supe por qué, porque no te hice algo, al menos no de forma consiente

-Sólo te quiero preguntar algo…_ me quedé mirándolo fijamente a los ojos esperando la pregunta, tenía el ceño fruncido

-Adelante

-Eres novia de Mazzocca?_ <>

-Novia de Simon? Ja! Que tiene que ver eso con que no nos hablemos?

-No me respondas con otra pregunta

-No, no soy novia de Simon, sólo somos buenos amigos

-Pareciera lo contrario, pasan mucho rato juntos

-Y que con eso?

-Sabes que Alex? Olvídalo, tengo mejores cosas que hacer…_ se dio media vuelta y se fue, yo me quedé con la boca abierta con la palabra en la boca. Se me hizo un nudo en la garganta, me quedé parada sola en el pasillo. Se me aguaron los ojos y empecé a llorar. <> A lo mejor Vanessa tenía más razón de la que yo quería. Adam me gustaba y por lo visto mucho, pero por qué?

Caminé vía el estacionamiento, pero cuando empecé a caminar escuché que me llamaron, era Simon, pero no quise voltear, lo sentía cerca de mí, así que me limpié rápido las lágrimas

-Alex!, no me escuchas?_ me tomó por el brazo derecho, y por visto no me había limpiado bien la cara_ que te pasa? Por qué lloras? Te vi hablando con uno de los Vangarret, que te hizo!?_ su expresión linda y amable cambió por completo por una severa y molesta

-Nada, sólo hablamos…_ en ese momento no sabía mentir, me sentía mal

-Ese imbécil….! No me importa que te haya dicho o hecho, le voy a partir la cara…._ me tomó la cara entre sus manos y salió corriendo en dirección hacia donde se había ido Adam

-Simon!, Simon no por favor…..!_ corrí detrás de Simon, hasta que encontró a Adam en el estacionamiento frontal

-Por que la hiciste llorar!?_ Simon le exigió con mucha rabia reflejada en el rostro

-De que hablas Mazzocca?_ Simon lo empujó

-Simon, por favor no….!_ traté de meterme pero Adam le devolvió el empujón

-Qué rayos te pasa!?

-No sé que hayas estado hablando con Alex, pero cualquier cosa que haya sido la hiciste llorar, y eso no te lo voy a permitir

-Quien eres tú para dejarme de permitir cosas? Eso es asunto de ella y mío, hasta donde sé ni su novio eres…_ la mirada de Simon se encendió por completo, y se le abalanzó a Adam encima agarrándolo por la el pecho de la camisa_ Qué le hiciste!?_ yo no sabía qué hacer, estaba temblando de los nervios y había mucha gente a nuestro alrededor viendo el espectáculo

-Quítame las manos de encima Mazzocca!

-Oblígame…_ Adam lo empujó y Simon le lanzó un puñetazo en la cara a Adam quién sangró un poco por la nariz. Adam le devolvió el golpe pero de forma más brutal, no sabía quién era más alto, pero ambos eran iguales en complexión física, pero Simon se veía más fuerte, aunque Adam se veía más peligroso por alguna razón. Simon cayó en el suelo votando sangre por la nariz, cayó encima de unos vidrios que estaba en el asfalto y se rompió las manos. La mirada de Adam cambió hasta ponerse negra, como si las pupilas se le hubieran dilatado y le estaban empezando a aparecer las mismas venitas alrededor de los ojos como los de la novia, pero no me quise fijar mucho en eso, salí corriendo hacia Simon

-Simon por favor ya!, estas lastimado, te cortaste las manos, tenemos que ir a la enfermería_ cuando voltee Adam había desaparecido.

-Ese cobarde….!_ me daba tranquilidad que Adam hubiera salido corriendo, pero… por qué? Se notaba que Adam no era del tipo de hombres que salía corriendo por miedo. Ayudé a levantar a Simon mientras todos los que estaban a nuestros alrededor hablaban entre sí sobre lo sucedido

-Estás bien?

-Sí, tranquila…_ volvió a mirarme con la ternura habitual

-Vamos a la enfermería, se ve serio, tienes vidrios en la mano todavía y la nariz la tienes rota_ caminamos hacia la enfermería que quedaba en el edificio principal y nos recibió una enfermera de complexión robusta

-Qué paso?

-Una pelea afuera… y cayó encima de unos vidrios rotos que habían en el suelo_ la enfermera le examinó las manos y la nariz

-Lo de las manos sólo será cuestión de limpiártelas y echarte un cicatrizante no son cortadas profundas por fortuna; la nariz está más delicada, hay que agarrarte 3 puntos dentro_ hizo un gesto de desaprobación con la cara y me miró como pidiéndome disculpas. La enfermera hizo su trabajo muy bien en media hora más o menos. Salimos de la enfermería directo al estacionamiento frontal, nos encontramos a Andrés y Adriana llegando a nuestros carros

-Dios mío que te paso Simon!?_ por lo visto Simon tenía peor aspecto de lo que yo creía, cuando lo detallé tenía gotas de sangre encima de la camisa amarilla que tenía puesta y tenía el pantalón sucio. Lo miré como diciéndole que no le dijera ni una palabra a ellos de lo que había pasado realmente

-Nada, una pequeña pelea Adri

-Con que tú eras uno de los implicados? Escuchamos el rumor por los pasillos, pero que pasó?

-Un imbécil que se quiso pasar por listo……_ me miró y cortó la historia

-Menos mal no pasó nada grave. Alex y tú estabas con él?

-Por fortuna si, pude detener a tiempo la pelea y llevarlo a la enfermería, se corto con unos vidrios que habían en el suelo

-Bueno Alex, yo me voy a mi casa, me duele un chorro la cabeza

-Seguro que puedes manejar?

-Si tranquila Adri…

-Alex te vienes a la casa o vas a acompañar a Simon?

-Yo creo que sí, después voy a comprar algo en el mini súper, de ahí me voy a la casa_ mis hermanos se despidieron de Simon preocupados, se fueron mientras Simon y yo nos dirigimos a su camioneta

-Seguro que vas a estar bien?

-Claro que sí, no es nada de muerte tranquila

-No es nada de muerte? Si no te hubieras caído y roto la mano, no hubiera tenido la oportunidad de interferir y detenerlos y no le hubiera dado chance a Adam para que se fuera. Gracias a Dios se fue! Si no, no sé qué hubiera pasado…

-Es un cobarde

-Lo que sea, pero gracias por defenderme…_ me miró tiernamente y esbozó una media sonrisa muy suave

-Yo por ti, lo que sea…. O sea, somos amigos no? Para eso estoy…_ en cierta parte me tranquilizó la aclaratoria que fuéramos solo amigos

-Bueno confío en tu juicio Simon, llámame o escríbeme un texto apenas llegues a tu casa por favor_ me besó en la mejilla y se montó en su camioneta y se fue.

Yo me fui a mi carro, me monté y me quedé congelada unos segundos viendo hacia ningún lado, no quería ir a casa, así que decidí irme al parque. Caminé y me senté en la misma banca donde Simon y yo nos habíamos sentado la última vez cerca de la laguna artificial. Me sumergí en el recuerdo de cuando conocí a Adam, de cómo logramos charlar tan cómodamente en tan sólo dos días de conocernos, sólo 2 días había hablado con Adam en el mes y medio que ya llevaba en Sioux Falls. Pero algo había pasado en esos dos días que me había encantado de Adam, había algo en él que me atraía como un imán, quería saber muchas cosas de él, sin tener que preguntárselas a Sam, deseaba con el alma poder ser otra vez su amiga, o por lo menos ser lo que éramos durante esos 2 días.

Luego llegó a mi mente como una película la escena de cuando estaba hablando con Adam en el pasillo de nuestro edificio y en la manera que me habló y se fue. No es que esperara un gran afecto de su parte tras habernos tratado sólo 2 días, pero si un poco de consideración. Además algo le tenía que pasar a Adam para que no me quisiera hablar, eso quería decir que si le importaba yo, al menos un poco para tomarse la molestia de no dirigirme la palabra, de eso estaba segura. Me eché a llorar durante un rato. Por qué me gustaba tanto Adam? Por su cabello?, por sus ojos? Por su cara? Por su misterio?, o por todo eso junto? Creo que la respuesta era lo último.

Pasé gran parte de lo que quedó de la tarde allí sentada, cuando recordé que tenía que hablar con Sam, así que saqué mi celular y lo llamé al número que Adam me había dado

-Aló?

-Sam?

-Si quién es?

-Hola es Alex!

-Hola Alex!, cómo estás? Días sin verte

-Bien… te llamo para avisarte que el sábado de la próxima semana es el cumpleaños de Adriana y estamos organizando una fiesta sorpresa para ella en mi casa, será que cuento con tu presencia?

-Por supuesto!, gracias por invitarme…

-Perfecto. Hablamos en la semana entonces

-Ok. Saludos_ lástima que yo no podía decir lo mismo

Fui al mini súper a comprar algunos víveres, pasé por Mcdonald’s y compré comida para llevar para nosotros tres, ya eran las 6.00. Conduje hasta casa lento, llegué y guardé el carro en el garaje. Entré a la casa con las bolsas; Adriana estaba sentada en la sala leyendo uno de sus libros de leyes

-Hola Alex! Como terminó de llegar Simon?

-Bien, llegó durmiendo_ seguí caminando hacia la cocina y dejé las bolsas en el mesón central

-Con quién se peleó?

-Con Adam

-Con Adam Vangarret!?

-Si

-Pero por qué?_ no quería hablar de esa parte

-No lo sé, líos entre ellos…._ saqué las cosas de las bolsas y Adriana me ayudó

-Alex, que te pasa?

-Nada_ nada? Cuando yo decía “nada” era porque me pasaba “todo”

-Tengo toda mi vida conociéndote Alexandra, que te pasa?_ la miré y decidí contarle porque si no Simon se lo iba a contar de todas formas

-Bueno, no sé si estás al tanto que Adam no me habla desde hace bastante tiempo

-Si, lo noté, me pareció raro, incluso le pregunté a Sam en una oportunidad, pero me dijo que su hermano era extraño y él no se metía en sus líos

-Si así es…

-Pero que pasó? Se pelearon por algo? Le hiciste algo?

-Sería lo más natural verdad?, pero no, dejó de tratarme de la noche a la mañana, y hoy le pedí una explicación, y me salió con la pregunta de que si yo era novia de Simon, y luego me dijo <<…déjalo así, tengo mejores cosas que hacer>> y se fue dejándome sola. Luego Simon me vio llorando, y conectó todo porque me había visto hablando con Adam y supo que estaba llorando por algo que me había dicho Adam y salió a buscarlo, y bueno… el resto creo que lo sabes

-Con que esas tenemos? Alex, no te das cuenta?

-De qué?

-Ambos se pelearon por celos_ <>

-Qué!?

-No hay que ser muy inteligente para darse cuenta. Adam no te trata desde hace tiempo, más o menos desde que tú y Simon salen, cierto? y Simon sale corriendo a defenderte de él porque te hirió. Les gustas_ que les gusto? De Simon lo suponía, era evidente, pero Adam?

-Yo gustarle a Adam? Vaya manera de demostrarlo

-Claro, está celoso Alex, sólo está furioso porque estás con Simon. Adam hizo mucho con protegerte ese día en el bosque, y de paso acompañarte a casa, se notaba que le interesabas, te miraba con deseo incluso

-Tiene sentido lo que dices, pero no lo sé, y dudo poderlo averiguar, no creo que nos volvamos a tratar alguna vez.

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